Composición del forjado colaborante.
La composición del forjado colaborante está hecha por mallazo anti-fisuración (para repartir de manera continua las cargas sobre la losa y absorber efectos de la temperatura y retracción), armado de negativos (para absorber los esfuerzos de tracción), armado de positivos (que aportan al conjunto la resistencia al fuego requerida) y perfil de chapa metálica grecada, y hormigón.
Todo ello colabora estructural mente para conformar una losa maciza con altas prestaciones mecánicas para dar solución a las diferentes situaciones requeridas en proyecto.
La chapa metálica que actúa de soporte para el hormigón y los demás elementos tiene unas embuticiones que conectan con el hormigón mejorando la adherencia o colaboración con el hormigón introducido en ellas.